En Quibdó, un grupo de 50 excombatientes que integran la cooperativa Héroes de Murrí realizaron la primera siembra de alevinos en estanques de geo membrana, que dentro de cinco meses se convertirá en su primera cosecha de tilapias.

Ditter Herrera, excombatiente de Farc-Ep, se ha entregado de lleno al proyecto piscícola de reincorporación colectiva en Quibdó, Chocó. Actualmente, Ditter es el representante legal de la Cooperativa Héroes de Murrí integrada por 50 personas en proceso de reincorporación quienes, en su mayoría, hicieron parte del antiguo frente 34 de las Farc-Ep que operaba en el occidente de Antioquia y en la zona del medio Atrato en Chocó.

Luego de dejar las armas en el antiguo Espacio Territorial de Capacitación y Reincorporación Vidrí, ubicado en Vigía del Fuerte (Antioquia), los excombatientes pensaron en varios proyectos colectivos; uno de éstos fue un proyecto piscícola a través del cual pudieran generar ingresos a los afiliados y brindar empleo a los mismos excombatientes. Tras el cierre de este ETCR en junio de 2018, Herrera y otras 79 personas acreditadas por el Acuerdo de Paz se radicaron en Quibdó, mientras que otras personas se asentaron en Risaralda y Caldas.

Al llegar a Quibdó, los integrantes de la Cooperativa Héroes de Murrí emprendieron una ‘cruzada’ para sacar adelante el proyecto.  “En 2018, buscamos diferentes opciones para obtener un predio dónde realizar el proyecto. Tocamos puertas con la institucionalidad, pero no fue posible. Solamente a través de la Asociación Aguas de Paz, creada también por excombatientes provenientes de Vidrí, logramos negociar un predio con un privado en las afueras de Quibdó, en la vía que conduce a Medellín”, cuenta Herrera.

Sin embargo, el proyecto aprobado en noviembre de ese año por el Consejo Nacional de Reincorporación (CNR) con un capital semilla de 400.000.000 de pesos, no contemplaba la adecuación del terreno, ni otros requerimientos indispensables para el acceso a los estanques y funcionamiento del proyecto en general.

“La sola adecuación de este predio nos costaba cerca de 200.000.000 de pesos, es decir, la mitad de nuestro capital semilla”, se lamenta Herrera al recordar todo lo que han vivido para lograr avanzar en este proyecto.

El colectivo tuvo que desistir del predio, pero una nueva oportunidad les permitió seguir adelante. Un empresario de la región contactó a la Cooperativa y les concedió un predio de ocho hectáreas en calidad de comodato por cinco años prorrogables.  Para lograr implementar el proyecto en este nuevo predio, Herrera y sus compañeros tuvieron que lidiar con ‘muchos documentos’, lo cual les tomó tiempo y reuniones, pero finalmente lograron que el CNR aceptara esta propuesta y pudieran iniciar con la ejecución.

El nuevo predio ubicado en la vía Quibdó-Pereira no requería muchas adecuaciones, sin embargo, la cooperativa tuvo que reajustar el presupuesto para construir una vía de acceso a los estanques, además, realizar la instalación de una red hidráulica y eléctrica adecuadas para el proyecto.

“La formulación contemplaba solamente la construcción de los estanques, su funcionamiento, la sala de procesamiento y alimentación, por eso tuvimos que ajustar los recursos para adquirir lo que faltaba. Ahora no tenemos la sala de procesamiento, también nos falta el cerramiento del predio, una casa para los cuidadores o celadores, entre otras cosas, que esperamos resolver con la ayuda del gobierno local u otros aliados que hemos contactado”, dice Herrera.

El equipo de Entornos Productivos del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) se vinculó desde el 2019 al proyecto para brindar apoyo técnico y ha acompañado las gestiones de la cooperativa con entidades ambientales y gubernamentales necesarias para el inicio de la construcción de la infraestructura.

Ya se han construido 7 estanques de geo membrana de 10 diámetros de ancho y 1,20 metros de profundidad, soportados en una base en concreto para mayor firmeza y conectados a la red hidráulica y red eléctrica. Cada estanque tiene la capacidad de almacenar 78 metros cúbicos de agua para cultivar hasta dos y media toneladas de tilapias, que representan 1.8 toneladas de carne de pescado, después del proceso de eviscerado. Además, se construyó un reservorio de agua para abastecer los estanques en tiempos de sequía.

Para sostener el proyecto, la Cooperativa se dividió en comités: comercial, administrativo y productivo, conformados por 3 o 5 personas que han sido capacitados en cada tema.

A través de PNUD, y previamente en 2018 con el SENA, la Cooperativa ha recibido talleres y capacitaciones presenciales y virtuales sobre piscicultura básica, manejo de registro, tipo de alimentación, el procedimiento para la siembra y cosecha, manejo de parámetros y de sistema biofloc, entre otros conocimientos necesarios para el cultivo de peces en estanques de geo membrana. El Programa de la ONU espera dejar una capacidad instalada para que la cooperativa desarrolle su actividad pecuaria piscícola con calidad, teniendo en cuenta todos los procesos técnico productivos aprendidos. 

“¡Por fin logramos nuestra primera siembra! Esta siembra debió realizarse en enero”, comenta Herrera, “pero por la pandemia del coronavirus nos vimos obligados a aplazarla hasta septiembre”. 

Herrera viajó en carro durante 16 horas, ida y regreso a Medellín, para recoger en la Estación Piscícola de la Universidad de Antioquia los 6.000 alevinos de tilapias para la siembra en Quibdó y que será cosechada dentro de cinco de meses aproximadamente.

La oficina regional de la Misión de Verificación, la cual ha venido acompañando el proyecto piscícola desde sus inicios, resalta el compromiso de la Cooperativa Héroes de Murrí para sacar adelante este proyecto, “una demostración de persistencia y superación, con un objetivo común, cumplir el sueño de ser parte de la sociedad, aportando al desarrollo de la misma”, afirmó Marcela Hoyos, oficial de Enlace de la Misión.

Sirley Moreno, coordinadora para el Chocó de la Agencia para Reincorporación y Normalización (ARN), dice este logro es una gran satisfacción “porque se está materializando un sueño que ha tenido muchos obstáculos por diversas situaciones, pero la perseverancia, el trabajo en equipo y la voluntad de los excombatientes, han permitido que hoy sea una realidad con la siembra de estos peces que representan el inicio de una cadena productiva de gran potencial para las personas en proceso de reincorporación, sus familias y la comunidad en general”.

La ARN, PNUD, SENA y la Misión de Verificación continuarán acompañando a la Cooperativa Héroes de Murrí en las gestiones con entes gubernamentales y organismos internacionales, necesarias para completar la infraestructura del proyecto, principalmente, la sala de eviscerado y el cerramiento del predio para garantizar la seguridad y calidad del producto cosechado.

Melissa Jaimes Ochoa
Oficial de Información Pública
Misión de Verificación ONU Colombia regional Quibdó