En el corazón del Catatumbo, en el antiguo ETCR de Caño Indio, nació una iniciativa inspiradora que combina moda y reconciliación: Puntadas por la Paz. Este proyecto, liderado por un grupo de 10 mujeres firmantes de paz, ha demostrado ser un ejemplo de transformación y empoderamiento. Las mujeres, guiadas por empresarias del sector moda y capacitadas por expertas en confección, han logrado introducir sus productos en las principales tiendas de moda del país.
 

Desde su inicio, Puntadas por la Paz ha contado con el apoyo de la Misión de Verificación de la ONU en Colombia (UNVMC), que durante cuatro años ha resaltado el enfoque de género y acompañado el proceso de estas mujeres. Gracias a su incansable dedicación, las participantes han logrado construir su propio taller de costura y fortalecer sus estrategias de marketing, configurando así un modelo de negocio en constante crecimiento.
 

A través de su marca IXORA, estas mujeres han logrado llegar al evento más importante de la moda en el país. Colombiamoda que se realiza en Medellín. Esta experiencia les ha permitido reproducir el mensaje de reconciliación y del renacer de sus proyectos de vida tras la firma del acuerdo de paz.

Ixora es la flor del Catatumbo, y representa la resiliencia de la mujer catatumbera que pese a las dificultades , siempre tiene una manera de florecer. “Nuestra marca se llama Ixora, inclusivas y autónomas. Nuestra expectativa es que la gente conozca nuestro producto y puedan comprar nuestras faldas. Ixora es una flor del Catatumbo que florece todo el año porque a pesar de la aridez del clima, del sol, de los rayos y de los truenos siempre es resiliente. Estamos en una tierra difícil, pero siempre hay alegría” dice Katerine Avella, lideresa del proyecto.

Esta semana, en Cúcuta, se celebró un hito importante para Puntadas por la Paz: el re- lanzamiento de su nueva colección. Este evento no solo marca la evolución de su negocio, sino que también simboliza un nuevo comienzo y la esperanza de un futuro mejor para las mujeres de Caño Indio y sus comunidades.
 

Puntadas por la Paz es más que un proyecto de moda; es un testimonio vivo de cómo la perseverancia, el trabajo en equipo y el apoyo internacional pueden transformar vidas y construir puentes hacia la paz y la prosperidad en Colombia.

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