Los jóvenes que trabajan por Miraflores, Guaviare

11 Abr 2022

Los jóvenes que trabajan por Miraflores, Guaviare


“Soy del pueblo desano y hablo la lengua materna del pueblo cubeo”, así responde Hernando Rodríguez cuando se le pregunta sobre sus orígenes. Nació hace 23 años en el municipio de Miraflores, Guaviare, en un resguardo indígena llamado Palmas Uno. Hoy, es uno de los líderes juveniles más influyentes de su municipio, con una misión de vida clara: lograr que decenas de jóvenes indígenas accedan a oportunidades en educación superior.
 


Haber nacido en uno de los municipios más afectados por el conflicto armado en Colombia, con múltiples necesidades y problemáticas, es todo un desafío para Hernando, quien fue elegido para representar a los jóvenes indígenas en el Consejo Municipal de Juventudes 2022 de Miraflores. Los consejos son los mecanismos autónomos de participación, concertación, vigilancia y control de la gestión pública, que permite la interlocución de los jóvenes con la institucionalidad.

“Me siento muy orgulloso de tener la oportunidad de velar por los derechos de mis jóvenes indígenas de los 14 resguardos que hay en el municipio. Quiero visibilizar algunas de las necesidades, como la falta de oportunidades para acceder a la educación superior. No somos hijos de padres pudientes en cuanto a recursos económicos”, expresó Hernando, quien también representa a los jóvenes de Miraflores ante el Consejo Departamental.
 


Él y otros 10 consejeros se posesionaron hace unas semanas en un acto protocolario organizado por la Alcaldía del municipio. Dentro de ese grupo de futuros administradores de Miraflores, hay cuatro mujeres, una de ellas representa a los jóvenes afrodescendientes y la otra a los campesinos. Entre los consejeros también hay un indígena y un joven, víctima del conflicto, elegidos por sus comunidades.
 


Aunque muchos de los habitantes de Miraflores coinciden en que la falta de oportunidades es una de las principales problemáticas del municipio, reconocen que, desde la firma del Acuerdo de Paz, ha primado la tranquilidad y la reconciliación.

Juan Sneyder Méndez es otro de los jóvenes que conforma el Consejo Municipal de Juventudes. Uno de sus objetivos es lograr que la paz que se ha logrado en su territorio se mantenga. “Quiero trabajar en cambiar la imagen que tienen muchos de Miraflores. Este es un municipio que quiere progresar.  No es todo lo que se dice, que es guerra, conflicto armado y coca”.

Durante la primera reunión, después de la posesión, los jóvenes hablaron de sus proyectos, planes y estrategias. El equipo de la Misión de Verificación de las Naciones Unidas de la oficina regional de San José del Guaviare, que acompaña periódicamente a este municipio, los escuchó. “Es importante seguir luchando para que la paz sea estable y duradera. Agradecemos la presencia y el apoyo de la Misión de la ONU, que siempre ha estado atenta a conocer nuestras necesidades para gestionar con diversos actores esa ayuda que tanto necesitamos”, señaló uno de los jóvenes.
 


Desde la Misión se implementa una estrategia de juventud, paz y seguridad para facilitar una mayor participación de jóvenes en las áreas del mandato de verificación. Esta estrategia va en línea con la histórica resolución 2250 aprobada en el 2015 por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas en la cual se reconoce el importante papel que pueden desempeñar los jóvenes en la prevención y solución de los conflictos, como agentes cruciales para la sostenibilidad, la inclusividad y el éxito de las iniciativas de mantenimiento y consolidación de la paz.
 


Los 11 jóvenes entre los 14 y 29 años escogidos para integrar el Consejo Municipal de Juventudes en Miraflores representan todas las zonas del municipio, incluso las más apartadas como Barranquillita, un sitio vulnerado por la violencia.
 


Además del consejo de juventudes, Miraflores cuenta con una plataforma juvenil que hace parte de un sistema de participación y que es presidida por Gineth Paola Álvarez. “Estamos muy lejos de todos, por eso es importante que los jóvenes se puedan reunir en espacios que aporten a un esparcimiento sano y que no vayan a coger lo que nosotros denominamos comúnmente malos caminos”, sostuvo.

Los jóvenes de Miraflores que trabajan por la reconstrucción del tejido social, la reconciliación, la paz y esperanza en su municipio, esperan lograr, con ayuda de quienes crean en ellos, acceso a conectividad, espacios deportivos y culturales, oportunidades educativas y otras actividades relevantes que los lleven a seguir trabajando con fuerza por su gente.


Por Katherine Arias Muñoz
Oficial de información Pública
Misión de Verificación de la ONU en Colombia